Dos recursos para presentar un proyecto a un posible inversor

Todo emprendedor en proceso de expansión debe aprender a optimizar la cantidad de tiempo que emplea para definir su iniciativa si quiere captar la atención de aquellas personas que disponen de recursos para financiar el crecimiento de la organización.

Cuando el proceso de emprendimientollega el punto de abrir el compás para incrementar la capacidad de producción, atender mayor número de clientes, atacar nuevos mercados y explorar nuevas área, se inicia un ciclo de reuniones con los potenciales inversores al que hay que llegar muy preparado si se desea conseguir inyección de para respaldar la progresión.

Primero que nada es importante ordenar las ideas claves del proyecto en frases cortas, puntuales, poco rebuscadas, comunes al ámbito social y sin muchos tecnicismos para intentar que el concepto del negocio sea entendido por individuos con diferentes grados de instrucción y formación con facilidad.

En el momento de la reunión es vital resumir la esencia del emprendimiento en las palabras claves que entienden los inversionistas que manejan el capital de la siguiente forma: “El proyecto se encarga de V para satisfacer las necesidades de W a través de X, utilizando Y, y se gestionará por medio del modelo de negocios Z”.

Así, en pocos minutos se resumirá la intención con contundencia para demostrar altos grados de conocimientos en la materia, capacidad para analizar el mercado, resolver problemas con rapidez y se generará un impacto psicológico positivo en los eventuales inversores que esperan largas explicaciones para detallar una iniciativa.

— por: Periódico El Emprendedor